La misión ESA/JAXA

BepiColombo completó su primer vuelo el 10 de abril, cuando la nave espacial se acercó a menos de 12.700 km de la superficie de la Tierra a las 06:25 CEST, dirigiendo su trayectoria hacia su destino final, Mercurio. Las imágenes reunidas justo antes del acercamiento más cercano retratan a nuestro planeta brillando a través de la oscuridad, durante uno de los momentos más desafiantes para la humanidad en la historia reciente.

Sistema Solar

Lanzado en 2018, BepiColombo se encuentra en un viaje que durará siete años hasta el planeta más pequeño e interior que orbita el Sol, el cual contiene importantes pistas sobre la formación y evolución de todo el Sistema Solar.

La operación es el primero de nueve vuelos que, junto con el sistema de propulsión solar a bordo, ayudará a la nave espacial a alcanzar su órbita alrededor de Mercurio. Los próximos dos sobrevuelos tendrán lugar en Venus y otros seis en el propio Mercurio...

Los últimos primeros planos de la Tierra de BepiColombo durante el vuelo.

Una secuencia de imágenes tomadas por una de las cámaras del MCAM a bordo de la misión euro-japonesa BepiColombo, mientras la nave espacial pasaba por delante del planeta durante su primer y único paso por la Tierra.

Las imágenes de la secuencia fueron tomadas en intervalos de unos pocos minutos desde las 03:03 UTC hasta las 04:15 UTC del 10 de abril de 2020, poco antes de la aproximación más cercana. La distancia a la Tierra disminuyó de alrededor de 26 700 km a 12 800 km durante el tiempo en que se capturó la secuencia.

En estas imágenes, la Tierra aparece en la esquina superior, detrás de la estructura de la nave espacial y su brazo magnetométrico, y se mueve lentamente hacia la parte superior izquierda de la imagen, donde la antena de media frecuencia es también visible.

La maniobra, la primera de un total de nueve sobrevuelos pero la única en la Tierra, ayudó a dirigir la nave espacial hacia Venus a medida que se acerca gradualmente a su órbita objetivo alrededor de Mercurio. Durante su travesía de siete años al planeta más pequeño e interior del Sistema Solar, BepiColombo utilizará dos veces la gravedad de Venus y seis veces la de Mercurio para escapar de la atracción gravitatoria del Sol. Esta necesidad constante de frenar requiere o bien mucho combustible o una trayectoria complicada con muchos sobrevuelos, de lo contrario BepiColombo no podría entrar en la órbita correcta alrededor de Mercurio.


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