El calentamiento global ha "cambiado" la propagación de los ciclones tropicales en todo el mundo

Un estudio encuentra que el cambio climático causado por el hombre ha desempeñado un papel en la configuración global de la distribución de ciclones tropicales en los últimos 40 años.

Según el trabajo, el número de ciclones tropicales que se originan en el Atlántico Norte y el Pacífico Central ha aumentado ligeramente, mientras que se han producido menos en el sur del Océano Índico y el oeste del Pacífico Norte.

Otros factores, como las grandes erupciones volcánicas y la liberación de aerosoles emitidos por el hombre, también han desempeñado un papel en la alteración de la distribución global de los ciclones, dice el autor principal a Carbon Brief.

La investigación "proporciona pruebas contundentes" de que el calentamiento global provocado por el hombre ha tenido "un impacto considerable en los ciclones tropicales a nivel global", según explica otro científico a Carbon Brief. Sin embargo añade, que se debe tener en cuenta que los resultados tienen asociada cierta incertidumbre.

Persiguiendo ciclones

Los ciclones tropicales son tormentas que se desarrollan en los océanos tropicales entre los 5º-30º de latitud norte o sur respecto al Ecuador, donde la temperatura del mar es de al menos unos 27.0°C. Las tormentas tropicales fuertes se llaman "huracanes" en el Atlántico Norte y el Pacífico Central y Norte, "tifones" en el noroeste del Pacífico y simplemente "ciclones tropicales" en el Pacífico Sur y el Océano Índico.

La investigación ha demostrado que el cambio climático probablemente aumentó la probabilidad de ocurrencia de muchos ciclones individuales, incluido el huracán Harvey, que tocó tierra en Texas en 2017, y el huracán Katrina, que azotó Nueva Orleans y sus regiones circundantes en 2005.

Sin embargo, actualmente no hay consenso sobre si el cambio climático está impulsando un aumento en el número global de ciclones tropicales. El mundo actualmente experimenta casi 100 ciclones tropicales al año.

Una razón para esto es que los registros globales del número de ciclones tropicales son relativamente cortos, ya que arrancan a partir de la era de los satélites meteorológicos alrededor de 1980. Otra es que los ciclones tropicales también están influenciados por las fluctuaciones climáticas naturales, que podrían estar enmascarando el impacto del cambio climático en el citado número de ciclones.

El nuevo estudio, publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), analiza cómo el cambio climático podría haber afectado la distribución global de los ciclones tropicales desde 1980 hasta 2018.

Encuentra que ha habido un cambio perceptible en la propagación de los ciclones en todo el mundo, explica el autor principal del estudio, el Dr. Hiroyuki Murakami, investigador climático de la Corporación Universitaria de Investigación Atmosférica (UCAR) y el Laboratorio de Dinámica de Fluidos Geofísicos en los EE. UU. Y el Instituto de Investigación Meteorológica en Japón. Él cuenta a Carbon Brief:

"El principal resultado de la nueva investigación es que el cambio climático ha tenido una  influencia evidente en el cambio en la distribución global de los ciclones tropicales en los últimos 40 años".

Cambiando la perspectiva.

Los investigadores primero estudiaron datos sobre la distribución global de ciclones desde 1980 hasta 2018. Esto se muestra en la siguiente figura, donde los colores del rojo al amarillo indican un aumento en el número de ciclones por año, mientras que del púrpura al verde reflejan una disminución.

 

Tendencia observada en el número anual de ciclones tropicales desde 1980 hasta 2018. Rojo a amarillo indica un aumento en el número de ciclones por año, mientras que púrpura a verde indica una disminución. Fuente: Murakami et al. (2020)

La figura muestra cómo el número de ciclones tropicales que se originan en el Atlántico Norte y el Pacífico Central ha aumentado en las últimas cuatro décadas, mientras que se han producido menos en el sur del Océano Índico y el oeste del Pacífico Norte. (Vale la pena señalar que los cambios anuales son relativamente pequeños. Por ejemplo, un aumento anual de 0.1 equivale a un ciclón adicional cada 10 años).

A continuación, los investigadores utilizaron modelos climáticos de alta resolución para llevar a cabo una gran cantidad de experimentos para investigar qué factores podrían haber influido en la distribución global de los ciclones tropicales desde 1980 hasta 2018.

Descubrieron que solo las simulaciones de modelos que incluían influencias antropogénicas, como las emisiones de gases de efecto invernadero y aerosoles ligados a la actividad humana, podían reproducir el patrón real observado de ciclones desde 1980 hasta 2018.

En particular, los investigadores señalaron que el cambio climático impulsado por el hombre es el origen más probable del aumento de  ciclones en el Océano Pacífico Central, que rodea a Japón y las Islas Marshall.

Los residentes locales caminan por una carretera hundida después del tifón Hagibis, en la ciudad de Mito, Japón. 15 de octubre de 2019. Crédito: SOPA Images Limited / Alamy Stock Photo.

Sin embargo, los aumentos en los ciclones tropicales en el Atlántico Norte están más estrechamente relacionados con las disminuciones en los aerosoles emitidos por el hombre liberados por la contaminación, Murakami trasladó a Carbon Brief:

“Identificamos que la mayoría de los ciclones tropicales en el Atlántico Norte en los últimos 40 años se deben a la disminución de los aerosoles antropogénicos en el Océano Atlántico Norte. La disminución de la contaminación por partículas, debido a las medidas de control, ha aumentado el calentamiento del océano al permitir que absorba más energía solar. Este calentamiento local condujo a aumentos en la actividad de los ciclones tropicales ".

Los autores también encuentran que el cambio climático inducido por el hombre está estrechamente relacionado con la disminución de la actividad de ciclones tropicales en el sur del Océano Índico y el oeste del Pacífico Norte. Murakami nos explica:

“Los gases de efecto invernadero están calentando la atmósfera superior y el océano (en estas regiones). Esto se combina para crear una atmósfera más estable, con menos posibilidades de que las corrientes convectivas de aire ayuden a generar y desarrollar ciclones tropicales”.

Sin embargo, vale la pena señalar que el período de estudio no incluye 2019, un año récord para los ciclones en el Océano Índico, dice el profesor Kevin Trenberth, científico principal del Centro Nacional de Investigación Atmosférica (NCAR) en Colorado, quien no participa en la investigación. El cual   dice a Carbon Brief:

“En 2019, hubo cuatro ciclones espectaculares en el Océano Índico y dos de ellos, en el sur del Océano Índico, no tenían precedentes, lo que va en contra de la disminución hallada aquí. La temporada de ciclones del sudoeste del Océano Índico 2018-2019 fue la temporada más catastrófica y más activa jamás contemplada desde que comenzaron los registros fiables en 1967 ".

Dichos ciclones incluyeron el ciclón Idai, que devastó Mozambique, Malawi y Zimbabwe en marzo de 2019, afectando a más de dos millones de personas.

Clima futuro

Los hallazgos podrían ayudar a explicar por qué no ha habido un cambio perceptible en el número de ciclones tropicales que ocurren globalmente en los últimos 40 años, según Murakami:

"No encontramos ninguna tendencia clara en el número de ciclones tropicales mundiales en los últimos 40 años. Esto se debe a que hay regiones que muestran aumentos o disminuciones. Entre todos se compensan, lo que no lleva a ningún cambio en el número total ".

La investigación se suma a la comprensión de los científicos de cómo el cambio climático está conformando el riesgo de ciclones tropicales, señala el Dr. Shuai Wang, físico atmosférico del Imperial College de Londres, que no participó en el estudio. El cual traslada a Carbon Brief:

“Como afirman los propios autores, todavía existe la incertidumbre de que debemos tener en cuenta al estudiar la información de este documento. Sin embargo, este trabajo proporciona una evidencia sólida de que el forzamiento antropogénico probablemente ha generado un impacto considerable en las estadísticas mundiales de ciclones tropicales".

(El estudio utiliza principalmente un modelo climático, aunque los autores dicen que ven "resultados consistentes" con un modelo independiente. Los autores también señalan que sería "preferible adoptar un enfoque de multi-modelo para reducir la incertidumbre").

Sin embargo, hay que destacar que este estudio solo investiga cómo el cambio climático podría estar afectando al número de ciclones en diferentes regiones del mundo, afirma Trenberth:

"Lo que se espera con el cambio climático es que haya un aumento en la actividad de los ciclones tropicales, lo que no significa aumentos en número, si no en la duración, frecuencia, vida útil, tamaño e intensidad

Fuente: Publicado el 4 de mayo de 2020 en Carbon Brief por Daisy Dunne

(Murakami, H. et al. (2020) Detected climatic change in global distribution of tropical cyclones, Proceedings of the National Academy of Sciences, doi/10.1073/pnas.1922500117).