En una noticia publicada el pasado 28 de julio por Jamie Clifton en WICE WORD NEWS, podemos leer que el Ayuntamiento de Enfield (Reino Unido), a partir de diciembre solo servirá comida vegetariana o vegana a través de sus servicios de catering como muestra de su compromiso con la crisis climática.

El citado Ayuntamiento quiere ser neutral en emisiones de Carbono para 2030 y como dice su Concejal Ian Barnes, eso implica "tomar medidas audaces ya veces impopulares". "La emergencia climática es real y la acción para remediarla debe ser local, nacional y global", escribe Barnes en el documento de acción climática de 40 páginas del Ayuntamiento.

Lógicamente este tipo de decisiones no son bien vistas por todos, como por ejemplo entre algunos grupos que defienden los intereses de los productores locales de carne, que si bien también están comprometidos con el desarrollo sostenible y con alcanzar un escenario neutro de emisiones de Carbono en 2040, consideran este enfoque totalmente equivocado. A esta visión se une la de aquellos que consideran que el Ayuntamiento no debería vigilar que es lo que comen.

Por el contrario otras personas han aplaudido la decisión que va en la línea de lo aprobado por otros Ayuntamientos y Universidades como las de Cambridge y Goldsmiths, que han eliminado la carne roja de los menús del campus.

Otras medidas que este Ayuntamiento tiene previstas en esta línea son la modernización de viviendas con alternativas energéticas de bajo consumo en Carbono, impulsar que los negocios sean neutros desde el punto de vista de las emisiones y hacer campañas de mentalización en las escuelas para reducir las citadas emisiones y poner en valor las estrategias de adaptación y mitigación.

Enlace a la noticia original: https://bit.ly/2DkagAu

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